¡A una nueva era le corresponde una nueva manera de hacer las cosas!
El Abogado o Abogada capaz de abrazar este cambio de era provocando en él un cambio cultural que le permita, además de ser un excelente vendedor de servicios jurídicos, ser un magnífico e implacable comprador de tecnología, tendrá una clara ventaja competitiva en términos de reputación, crecimiento profesional y lo más importante, una mayor cartera de clientes en los años venideros.
¡Si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra! clamaban miles de taxistas en verano del 2018 y a pleno sol en el Paseo de la Castellana. El motivo: la irrupción de plataformas como Uber y Cabify amenazando su monopolio.
De la misma manera que los taxistas, los abogados tienden a hacer “la guerra” por su cuenta, minimizando su posición de fuerza frente a la irrupción de plataformas tecnológicas que cuentan con la motivación, los conocimientos y la atención de los inversores para satisfacer las necesidades de un cliente cada vez más digital, proactivo y exigente.
Antes de la pandemia, todavía podíamos ver como muchos abogados/as se paseaban por la orilla de la playa sin darse cuenta de que la ola del tsunami tecnológico la tenían delante. Ahora, ya nadie cuestiona que la ola ha tocado la orilla.
En el 2020 pudimos comprobar cómo estando más aislados que nunca, confinados en casa en una situación de vulnerabilidad e incertidumbre desconocida hasta la fecha, Internet y las TIC’s fueron nuestro gran aliado consiguiendo quitarle dureza a una situación para la que no estamos preparados.
Hasta la revista TIME nos advierte que el Metaverso lo cambiará todo: “El Metaverso remodelará nuestras vidas. Asegurémonos de que sea para bien”
Según está reconocida revista, el Metaverso es una nueva era de Internet y de las Redes Sociales por lo que cabe preguntarse:
1. ¿Quiero o no quiero aprovechar las oportunidades que ofrece el Metaverso?
2. Y si la respuesta es ‘SI’ ¿puedo hacerlo solo o mejor acompañado?
La Inteligencia Artificial es cada año más inteligente y por lo tanto más competente para atender cuestiones jurídicas más complejas de manera más rápida, barata y mejor que si lo hiciera una persona.
A pesar de la resistencia que ya es estereotípica del sector legal, son varias tecnologías las que han logrado penetrar y transformar la profesión.
Desde el Internet hasta la inteligencia artificial, la Abogacía ha visto a su industria adaptarse (en realidad, reaccionar) a los nuevos contextos facilitados por la era digital.
INTERNET es la oportunidad de que millones personas alrededor de todo el mundo puedan acceder en cualquier momento y desde cualquier lugar al conocimiento y al saber.
Más del 85% de la población utiliza GOOGLE de forma regular para satisfacer sus necesidades informativas y/o de consumo… y sí, entre ellos también la solución a sus problemas legales.
El 5G puede incluso ser tan rápido que todo lo que hacemos en INTERNET ahora relativamente rápido PASARÁ A PARECER SER INSTANTÁNEO.
Si la INTELIGENCIA ARTIFICIAL logra predecir con un 95% de precisión el resultado de las decisiones judiciales, el sistema legal dejará de ser lo que es.
El universo Legaltech ha crecido tanto y se ha vuelto tan extenso que ha dado lugar a que no siempre sepamos de qué se habla cuando nos referimos a Legaltech.
Abreviatura anglosajona de Legal Technology (tecnología legal), cuando hablamos de Legaltech nos referimos al uso de tecnología para proporcionar servicios legales, ni más ni menos.
Aunque la irrupción de tecnologías disruptivas esté al frente de su desarrollo, las sucesivas crisis económicas que la han acompañado han impulsado el emprendimiento y nuevos modelos de negocio enfocados a satisfacer las necesidades de una profesión que sufre una gran presión por tiempo y honorarios como de un consumidor de servicio jurídicos cada vez más digital, proactivo y exigente.
En este contexto, la Legaltech ya no sirve únicamente para hablar de herramientas tecnológicas que utilizan los abogados con objeto de mejorar en eficiencia y rentabilidad, sino también de herramientas que sustituyen a ciertas tareas propias de la Abogacía incorporando un alto componente de inteligencia artificial y otras técnicas punteras.
¿Cómo crees que va a impactar la tecnología en el sector?
35%
Reducción de contratación de abogado
62%
87%
53%
47%
74%
26%
Porque la sociedad y la economía piden cada vez más nuevos modelos de negocios basados en la tecnología.
En plena era tecnológica, un abogado que funciona como en el siglo XX es como una cabina de teléfono que todavía no sabe que lo es.
El ‘Dato’ es ya el oxígeno del siglo XXI y el algoritmo nuestro mejor amigo. El comportamiento del consumidor de servicios jurídicos ha cambiado; ahora espera que cuando busque “abogado” en Internet este aparezca sin más para cubrir sus necesidades informativas y/o de consumo.
No se trata de hacerse informáticos o en Community Managers, sino de invertir en herramientas que hagan el ejercicio de la profesión “volar”, empatizando mejor con la psicología de un consumidor de servicios jurídicos con acceso a Internet.
CONSECUENCIAS DE LA IRRUPCIÓN DE INTERNET EN EL COMPORTAMIENTO DEL CONSUMIDOR DE SERVICIOS JURÍDICOS
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